Me gustaban cuando empezaron. Tenían su gracia y critiqué mucho a Antena 3 cuando decidieron quitarla de la noche de los domingos.
Luego cuando volvió a su nuevo horario y con los cambios pertinentes, parece que la audiencia empezó a darle su beneplácito, pero tengo la sensación que eso va a dejar de suceder como la serie siga por el camino que han emprendido ultimamente.
Ayer el capítulo titulado "Los hombres de Osama", lo que podía haber sido un buen capítulo si la duración de esta serie fuese lo habitual a lo que nos tienen acostumbrados las series norteamericanas (40 minutos), pasó a ser una de las birrias más grandes que he visto ultimamente en TV, aunque la verdad, esto no es muy dificil.
Empezamos con la costumbre que ha cogido Antena 3 de esperar sea como sea a que termine Cámera Café en Telecinco. Para ello utilizan su programa TVON que cortan sin aviso previo cuando les viene bien. Cuando está terminando Cámera Café, termina también TVON de forma que la gente que deje en ese momento la cadena de Fuencarral, llegue a la de San Sebastian de los Reyes sin la serie empezada. Una buena estrategia comercial, pero un insulto a los televidentes.
Una vez que empieza el episodio hay que alargarlo como sea para que llegue a ocupar aproximadamente una hora y media de tiempo televisivo. Para conseguirlo, como parece ser que la imaginación de los guionistas empieza a escasear, no se cansan de ponernos situaciones repetidas que ya cansan. El temita amoroso de Lucas y Sara cansa. Las cancioncitas de Pignoise aburren. Y ayer nos regalaron más de media hora de recuerdos con imágenes de episodios anteriores que solventaban la falta de argumento de un capítulo que como he dicho, podía haber sido gracioso si la duración fuese menor, pero que ayer fue tortuoso. Si a esto le añadimos los continuos cortes publicitarios provocan que el televidente se piense si el próximo capítulo le va a merecer la pena seguirlo.
No digo nada de los artistas que me parecen bastante buenos y que cumplen bien su papel. La serie sería divertida pero a estas alturas se está quemando rapidamente.